Tras el Escape Room virtual de Talento que celebramos el pasado 22 de enero, hemos continuado con la actividad de 2025 celebrando un nuevo desayuno directivo enmarcado en la iniciativa ‘Liderando en Femenino’ del área de trabajo de Mujer e Igualdad de Oportunidades.
Con el propósito que nos marcamos, dentro de esta línea de actividad, de abordar competencias y actitudes que nos parecen importantes para seguir potenciando la presencia y el crecimiento de las mujeres en el ámbito laboral de Castilla y León, hemos querido dar un paso más allá: el de incorporar en cada uno de nuestros encuentros una aproximación a una competencia (en este caso, la confianza) que creemos importante para incrementar el empoderamiento, la empleabilidad y la promoción de las mujeres en el ámbito laboral a través de experiencias de algunas de ellas.
El síndrome de la impostora. ¿Cómo avanzo?
Bajo el liderazgo de Getronics, Serbatic, Grupo Eulen y Fundación ASTI y, en esta ocasión, con el patrocinio de Grupo Eulen, la colaboración de la Dirección General de la Mujer de Castilla y León, dentro del marco del protocolo firmado con la Consejería de familia e igualdad de oportunidades, y la implicación de Kenia Aranda, Identity & Access Management Consultant en Telefónica y mentora de STEM Talent Girl, hemos hablado largo y tendido sobre el ‘Síndrome de la Impostora’.
De la mano de Kenia, técnico especialista en Ciberseguridad y estudiante de último año del grado en Física en la Universidad Internacional de la Rioja que entró en Telefónica gracias a las becas Talentum (programa que impulsa el Talento Joven dentro de la empresa) y actual «ficha» imprescindible en el desarrollo y crecimiento de su equipo (Gestión de Identidades), hemos tenido la oportunidad de conocer su experiencia personal. Cómo ha afrontado y afronta la lucha contra este síndrome que se presenta como creencia limitante a la hora de estudiar una carrera, de postularse a un puesto de trabajo o de aceptar un cargo de alta responsabilidad dentro de una compañía.
No todos los días tenemos la posibilidad de escuchar y empatizar con gente joven que, lejos de lo que pueda parecer, también han tenido ocasión de experimentar el síndrome del impostor desde temprana edad. Este encuentro nos ha permitido tomar conciencia acerca del impacto que tiene el entorno (tanto personal como profesional) en la toma de decisiones o en la misma generación de una sana autoestima, de las expectativas que culturalmente se asocian con determinadas etiquetas (mujer/hombre, joven/mayor, letras/ciencias…), del papel del «propósito» a la hora de vencer los obstáculos del camino, etc.
Pero no solo eso. Durante la jornada, también identificamos obstáculos y descubrimos propuestas que nos ayuden a facilitar la incorporación de la mujer en las áreas STEM de las organizaciones, gracias a la intervención de Rocío Milano, responsable del área técnica de la Dirección General de la Mujer de Castilla y León ; y contamos con Mª Victoria Moreno Saugar, Directora General de la Mujer, para hacerse cargo de la clausura de este encuentro en el que tratamos de compartir y visibilizar, con normalidad, como el síndrome de la impostora es una barrera más para avanzar en el empoderamiento femenino y en la igualdad de oportunidades real en el ámbito profesional.
Desde aquí, nuestro agradecimiento a todos ellos: líderes del Área de la Mujer de EXECyL; a todo el equipo de la Dirección General de la Mujer, por su innegable implicación; a Kenia, por su disposición y su frescura; a Grupo Eulen, por ayudarnos a endulzar el encuentro patrocinando un rico desayuno; y como no, a todos los asistentes que nos han acompañado en esta ocasión.
¡Nos vemos en la próxima!